Doctor Miguel Romero

¿Tú también tienes condromalacia rotuliana?

La condromalacia rotuliana es una de las frases que más nos encontramos en los informes de una resonancia magnética.

De entrada, puede parecer una palabra rara, aunque es fácil explicarla.

No es más (ni menos) que un desgaste en el cartílago de la rótula. El que se desliza sobre el fémur cuando doblamos y extendemos la rodilla.

Como te decía, aparece habitualmente en los informes de las resonancias en personas por encima 40 años (a veces incluso en personas más jóvenes).

En las siguientes líneas veremos qué causas pueden producirla, si es el culpable de las molestias que puedas tener en tu rodilla y que opciones tenemos para disminuir los síntomas.

condromalacia rotuliana causas

Índice de contenidos

Causas de la condromalacia rotuliana

Ahora ya sabes que la condromalacia rotuliana es el desgaste del cartílago de la rótula, pero igual te preguntas como se llega hasta esta situación.

Como cualquier desgaste, el principal causante es el paso del tiempo. A mayor edad más posibilidades.

Pero no es el único factor.

Entre las causas hereditarias tendríamos:

  • Una mala alineación de la pierna, ya sea en varo (piernas en paréntesis) o en valgo (piernas en x)
  • Posición más alta de la rótula de lo habitual.

Estas dos situaciones hacen que el deslizamiento de la rótula sobre el fémur no sea el adecuado, aumentando el roce y la velocidad del desgaste.

Luego estarían las lesiones traumáticas

Determinados traumatismos sobre la rótula o el fémur que modifiquen la anatomía (como fracturas o luxaciones) harán que aumente la fricción entre ellos, produciendo inflamación y desgaste.

Como se diagnostica la condromalacia rotuliana

Historia clínica

El dolor habitual que causa la condromalacia rotuliana es un dolor en la parte anterior de la rodilla, como encima de la rótula, que se incrementa en situaciones como subir escaleras, agacharse o al levantarse de una silla.

Esto tiene una explicación, y es que la articulación femoropatelar (la que forman la rodilla y el fémur) tiene su máxima presión cuando la rodilla se dobla unos 20º.

En ese momento aumenta la presión en la articulación, produciendo el dolor más intenso.

Exploración física

En la exploración comprobaremos ese dolor anterior, que aumenta al presionar la rótula contra el fémur.

Hay una maniobra muy típica que se llama la maniobra del “cepillo rotuliano

Consiste en deslizar la rótula sobre el fémur a la vez que la presionamos hacia el mismo fémur.

Cuando es positiva, provocará un importante aumento del dolor.

Pruebas complementarias

Las pruebas complementarias más utilizadas en la condromalacia rotuliana son las pruebas de imagen.

  • Radiografía: Hay proyecciones específicas que nos muestran la forma que tiene la rótula. Cuando hay irregularidades podemos sospechar que la rótula ya tiene cierto desgaste.
  • Resonancia magnética: es la prueba que tiene más sensibilidad para detectar las lesiones de cartílago. Por eso aparece con tanta frecuencia la condromalacia rotuliana, ya que es capaz de diagnosticarla cuando es leve.

De hecho, muchas veces cuando se hace una resonancia por otras causas (como lesiones de ligamentos o meniscos) aparece esta condromalacia, sin que el paciente tuviera ningún tipo de síntomas.

grados de lesión de la condromalacia rotuliana

Grados de lesión de la condromalacia rotuliana

Como en todo desgaste de cartílagos en general, la condromalacia rotuliana se mide en grados, que van de 1 a 4.

Es más habitual verlo expresado en números romanos, es decir de I a IV.

Esta clasificación, descrita por el Señor Outerbridge va de menos a más.

Te resumo estos grados:

  • Grado I: Reblandecimiento y edema (inflamación) del cartílago
  • Grado II: Fisura o fragmentación del cartílago <50% de su grosor o pequeñas superficies.
  • Grado III: Fisura o fragmentación del cartílago >50% de su grosor o superficies más grandes
  • Grado IV: Desaparición del cartílago, con exposición del hueso que está habitualmente bajo dicho cartílago (subcondral)

Como puedes imaginarte, a mayor grado de afectación, más intensos suelen ser los síntomas y más rebeldes al tratamiento.

Aunque como siempre pasa en medicina, a veces hay casos con desgaste importante con pocos síntomas… y al revés.

opciones de tratamiento de la condromalacia rotuliana

Opciones de tratamiento de la condromalacia rotuliana

Tenemos varias alternativas para el tratamiento de la condromalacia rotuliana. Iremos de menos a mayor agresividad en función de la evolución y siempre ajustándonos a los síntomas que presenta el paciente.

Tratamiento conservador

En los primeros días tras los síntomas, solemos recomendar frio local y reposo relativo en función de las molestias que tenga cada paciente.

Esto es suficiente en las situaciones que no se prolongan más allá de dos o tres semanas o que han aparecido después de algún esfuerzo físico por encima de lo habitual, como alguna excursión a la montaña.

Pero en pacientes que ya llevan más de 4 semanas o incluso meses con los síntomas hay que ir un paso más allá.

Y el siguiente escalón de tratamiento suele ser la fisioterapia.

Los objetivos de esta terapia suelen ser fortalecer la musculatura del muslo (sobre todo el cuádriceps) con el objetivo de “suavizar” el deslizamiento de la rótula sobre el fémur (tracking rotuliano).

Además, podemos sumar ciertas técnicas antiinflamatorias que son bastante eficaces el grado I de la condromalacia rotuliana (inflamación del cartílago sin fisura).

Si el tratamiento ha sido efectivo, al finalizar se le darán al paciente ciertas recomendaciones para mantener su musculatura a punto, con el objetivo de disminuir las posibilidades de recaídas.

Infiltraciones

Si tras la fisioterapia no hemos conseguido el control de dolor que tenemos, empezamos con los tratamientos invasivos.

Dentro de este grupo, las infiltraciones con determinadas sustancias tienen un papel protagonista, siendo utilizadas de forma frecuente.

Tenemos 3 opciones

Infiltraciones con corticoide + anestésico local

Es la infiltración clásica. Como ventajas tiene que es la más económica y que suele tener buena respuesta inicial.

Como inconvenientes destaca su agresividad contra el tejido del cartílago, y aunque en un primer momento puede aliviar el dolor, si se administran con frecuencia pueden aumentar el daño sobre el cartílago y el resto de estructuras de la rodilla (meniscos, ligamentos, etc.)

Hoy en día se suelen reservar para pacientes de edad avanzada, o cuando no se dan las condiciones económicas para utilizar las otras dos alternativas.

Infiltraciones con ácido hialurónico

Esta sustancia, utilizada también en medicina estética, funciona como un lubricante articular, disminuyendo la fricción entre el fémur y la rótula y consiguiendo aliviar tanto la inflamación del cartílago como el dolor del paciente con bastante efectividad.

Los grados de condromalacia rotuliana I y II son los escenarios ideales para este tipo de infiltraciones.

Infiltraciones con plasma rico en plaquetas (PRP o PRGF)

Estas infiltraciones se realizan administrando un concentrado de plaquetas obtenido de la sangre del propio paciente.

Este concentrado tiene la capacidad de regular (y disminuir) la inflamación generada por el daño del cartílago lo que hace disminuir el dolor.

Existe controversia en los estudios sobre la capacidad de regenerar tejidos de este concentrado. La realidad a día de hoy es que no está demostrado que lo consiga, pero si que está probado una mejoría importante del dolor en gran parte de los pacientes que optan por este tratamiento.

Si a esto le sumamos que, al ser tejido del paciente, no tiene prácticamente efectos secundarios, es una opción que está cobrando mucho protagonismo tanto la condromalacia rotuliana como en otras lesiones (tendinitis, etc).

Tratamiento quirúrgico

Por último, tenemos el tratamiento quirúrgico, que en la condromalacia rotuliana dos opciones principales:

  • Cirugía de reparación de cartílago: se reserva para casos de lesiones aisladas y de tamaño pequeño (úlceras condrales), habitualmente provocadas tras un evento traumático como una luxación de rótula.
  • Cirugía de reemplazo de la articulación femoropatelar. Consiste en poner una prótesis de metal solamente de esta articulación. Indicadas en lesiones grado IV muy dolorosas, cuando los demás tratamientos no han conseguido controlar los síntomas

tratamiento quirúrgico condromalacia rotuliana

Conclusiones y recomendaciones

La condromalacia rotuliana es una de las causas más importantes de dolor en la parte anterior de la rodilla.

Prácticamente toda la población va a tener algún grado de condromalacia a lo largo de su vida, por lo que es importante tener claro cómo enfrentarnos a ella.

Una buena musculatura del muslo, equilibrada y manteniendo el peso corporal dentro de límites normales son las mejores estrategias para prevenir esta lesión.

Por ello, el tratamiento inicial suele ser corregir las causas que nos provocando esta situación. Ahí la fisioterapia es nuestro primer escalón de tratamiento.

Para casos en los que no es suficiente, las infiltraciones son una opción con alta eficacia y un balance riesgo-beneficio positivo en la gran mayoría de situaciones. Sobre todo, las de ácido hialurónico y plasma rico en plaquetas.

La cirugía está reservada para casos muy concretos, que deben ser evaluados de manera individual ajustando bien el coeficiente riesgo-beneficio.

PD1. Y si te has quedado con alguna duda, pregunta en los comentarios.

PD2. Y si quieres leer otro artículo, pulsa aquí.

PD3. O también puedes contactarme. Es aquí

PD4. Si buscas traumatólogo en Bilbao podré ayudarte.

¡Cuéntame más!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *